Rita: desde Huelva recuerda el tifus en tiempos de covid

PRESENTACIÓN:

Mi abuela se llama Rita Fernández, tiene 84 años y vive en Isla Cristina (Huelva), en mi pueblo natal y en el que vivo cuando no estoy en Granada estudiando. He decidido hacerle la entrevista a ella porque pasa mucho tiempo sola, a pesar de que viva con mi abuelo Aurelio Rivero (el cual lleva ya unos cuantos años enfermo y empotrado en una cama, con problemas de habla).

TESTIMONIO:

Este testimonio comienza con la presentación de mi abuela, hecha por sí misma, diciéndonos su nombre, edad y sexo, además de su lugar de procedencia. Con respecto a las preguntas puestas como ejemplo, las respondió en las siguientes líneas.

Empezó contándome que, como su padre murió a los 4 años víctima de un naufragio, se tuvo que criar durante mucho tiempo con sus tíos en Las Palmeras (una plazoleta del pueblo), ayudándolos en las tareas de casa, les iba a buscar agua al pozo, le buscaba el carbón, fregaba,… También, nos dijo que jugaba en esa misma plaza con sus amigos al escondite, a la comba,… No estudió, estuvo en el colegio durante un corto periodo de tiempo, aprendió en casa, ya que la mayoría de colegios que había eran privados. Luego más mayor, con 14 o 15 años, se empezó a reunir con sus amigos de la juventud, iban a bailar por las noches, jugaban,… Todo esto, explicado resumidamente.

Entre los cambios físicos, destaca que ella se notaba antes mucho más activa, más «viva»,… textualmente, dice que ella estaba estupendamente. Bordaba mucho (era su «trabajo»), hacía todas las tareas de la casa, iba a comprar, criaba a sus hijos, se encontraba mucho más joven,… Además destaca que tenía menos canas, su pelo era negro y ondulado, y más largo que cómo lo tiene ahora (dice que se hacía una cola en el pelo, pero ahora tiene el pelo cortito). Se echó novio, pero no se casó muy joven. Era más delgadita, pero sin embargo no está gorda. Ella dice que, comparada con su madre, se ve mucho más joven que ella con su misma edad. Como ejemplo, me dice que llevó el mismo traje para la boda de mis padres que para la boda de mi primo mayor, habiendo 22 años de diferencia entre ambas ceremonias. Nos dice también que ya la vista no la tiene igual que antes, los últimos años que bordó, era mi abuelo el que le ensartaba los hilos en las agujas.

Me comentó, que a su parecer, el que una mujer u hombre envejezca antes o después depende casi en su plenitud del trabajo que ejercía en su etapa adulta. Nos pone de ejemplo a mi abuelo y a sí misma: dice que un marinero sufre y se desgasta mucho, y que hay que hacer un gran esfuerzo físico para ejercerlo. Por ello, ve normal que mi abuelo haya envejecido antes que ella, y más bruscamente. Aunque resalta, eso no quita que las mujeres no puedan envejecer antes también por haber tenido un trabajo duro durante sus vidas.

Ella dice que de lo que más orgullosa se siente en su vida es de sus tres hijos, y de haberse casado con un hombre tan bueno como mi abuelo. Dijo que él siempre se preocupó en traer dinero a casa, no abundaba, pero tampoco les faltaba nunca un plato en la mesa. Se preocupó de pagar las bodas de sus tres hijos, a pesar de ser un marinero humilde y de solamente tener un sueldo en su casa, ahorraba el dinero para poder pagárselas. Comenta también que nunca lo ha visto borracho, siempre que bebía cerveza era la sin alcohol; nunca le ha levantado la mano ni le ha dicho una mala palabra, nunca le ha faltado nunca un duro en su casa, y eso lo agradece muchísimo. Además, también agradece que sus hijos tengan la misma consideración que tuvo su padre, ayudándolo ahora que está enfermo y en cama, y de tener 6 nietos (todos varones) muy guapos y a los que quiere mucho jajajaja.

Hablando de su familia, nos cuenta que mi abuelo siempre le traía pescado, todo los días. Dice que estaba cansada de limpiar pescado, pero que mejor eso a que le faltara dinero. También habla de sus dos hijas y su hijo, muy responsables y buenos con ellos, resalta también que son muy inteligentes. Destaca que nunca han tenido percances ni problemas, que está orgullosa también que no fume nadie en su casa, y que mi tío, que fue el único que fumaba, dejó de fumar (y cuando fumaba se iba fuera de casa y entraba una vez terminaba). Habla de que está muy contenta con la actual mujer de mi primo mayor, y de las novias que conoce de sus nietos. Se entera de todo lo que consiguen sus nietos, sus carreras, títulos, todo lo malo y lo bueno que le pasa. Fue una gran sorpresa para ella que mi primo mayor y su mujer le dieran la noticia de que iba a ser bisabuela en unos meses.

Cuando le pregunté sobre sus amigos y la relación que tenía con ellos, me dijo que todos sus amigos de la infancia y adultez estaban ya todos fallecidos. Dice que ella disfrutaba mucho del tiempo que pasaba con ellos, de los bailes que hacían en La Unión, un bar donde ponían música y bailaban toda la noche. Nos cuenta una anécdota que la hizo muy feliz mientras la contaba: dice que en Nochevieja, cuando todos estaban bailando y quedaba poco para que sonaran las campanadas, salían todos de ese bar bailando la conga e iban todos bailándola hasta la puerta del ayuntamiento. Más específicamente le dije que me explicara un poco sobre sus amigos actuales, ya que pensé que alguno tendría que tener, pero dijo que ya ella no tiene amigos, ya son todos conocidos y familiares que la visitan.

Sobre su trabajo, primero me comentó que ella el único trabajo que tenía era el que hacía en su casa (ama de casa) y bordar, pero luego se acordó de que tuvo una lechería en la Plaza de Abastos con 12 años, y en estaba en ella sola. ¡Negocio propio con 12 años!, pero cerró para ayudar a su madre a bordar y en las tareas de la casa. Básicamente, se dedicó a bordar y a las tareas de la casa.

Sobre su música favorita, primero me dijo que su comida favorita eran las albóndigas jajajjajja, pero le volví a repetir la pregunta y nos dijo que es el flamenco, aunque música tipo pop-flamenco también le gusta mucho. Y los artistas y cantantes que más le gustan y gustaban son Rocío Jurado (la cual destaca y le pide perdón a Isabel Pantoja ya que a ella le gusta mucho más «La Pantoja») y Manuel Carrasco. Las canciones que solía escuchar en su casa eran las de Antonio Molina ya que a mi abuelo le gustaba mucho este cantante.

Los bailes que más le gustaban a ella era el vals, los pasodobles, las sevillanas,… Me dice que lo bailaba con sus amigos en la antes mencionada La Unión, en el Miramar (otro bar del pueblo,…) Y me dice que se sentía con mucha energía cuando lo bailaba, muy feliz y que cada vez que terminaba una canción quería que volvieran a poner otra para seguir bailando y disfrutando. Actualmente, ella no se ve bailando, pero después me dijo que, si le ponían música y una persona que supiera bailar bien con ella, a lo mejor se lanzaba. Pero deja claro que ella no se ve bailando y haciendo ejercicio físico a la vez, habiéndole dado como ejemplo claro clases de Pilates, zumba, yoga, gimnasia de mantenimiento,…

El deporte como tal dice que no le gusta, no le atraen ni le han atraído, pero lo único que le gustaba era jugar a saltar a la comba, la rayuela,… entre otros juegos tradicionales que se jugaban en la calle en su época. Lo jugaba con sus amigos, cuando era pequeña, en la plazoleta donde tenía la casa de sus tíos.

Sobre la situación actual, primero nos dijo que piensa que hay mucha falta, mucha hambre, mucha calamidad, mucho golferío,… poniendo como ejemplo un caso que le pasaba en frente de su casa. Pero después, con un tono conspiranoico, nos dijo que algún país o algún terrorista, ha soltado un virus al aire y nos ha llegado a todos, pero después le especifiqué que se dice que viene de unos murciélagos o de un laboratorio de China. Pero dice que tampoco sabe mucho sobre eso, solo que se tienen que quedar encerrados y que tiene que tener precaución con el contacto con otras personas.

Cuando le pregunté sobre si había vivido una situación parecida en su vida, me comentó que lo más parecido que ella recuerda era el Tifus, el cual azotó a mi pueblo y se llevó varias vidas con él. Además, me recitó una canción que se cantaba en esa época con el virus presente y me hizo bastante gracia, ya que tenía un tono algo irónico y sarcástico.

Por último, al preguntarle sobre qué le había parecido la entrevista, si le había gustado y si volvería a hacer proyectos parecidos (incluso profundizar en ellos), me dijo que estaba encantada de haberme ayudado, que le había gustado mucho y que le había hecho recordar muchos momentos bonitos (me lanzó un beso y me dijo que me quería mucho, tanto a mí como a todos sus nietos). Y además, me comentó que si algún día volvía a necesitarla para que respondiera unas preguntas, ella estaba dispuesta a ello, como en ocasiones anteriores en trabajos que la he necesitado (entrevistas, recuerdos,…).

Aquí, con estas palabras y posteriormente mirando un álbum de fotos, concluyó su testimonio.

Habilidades

Publicado el

16/06/2020